27 Abr 28 abril. UGTCyL reclama “hacer de la salud laboral un derecho fundamental”
El 28 de abril es el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo y, por este motivo, UGT Castilla y León, ha convocado, junto a Comisiones Obreras, concentraciones bajo el lema “La prevención en el centro de recuperación. Hacer de la salud laboral un derecho fundamental”.
52 personas trabajadoras muertas en un año
Los datos de 2021 “hablan de un repunte en el número de accidentes con baja situándose en 27.860, 3.581 más que en 2020, siendo 52 de ellos mortales”, según indican desde la secretaría de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT Castilla y León. Y, si bien es cierto que la incidencia de la siniestralidad se encuentra por debajo de la etapa prepandemia “también lo es que sigue estancada y no se ha podido reducir en la última década”
En este sentido consideran “esencial que en este momento de reactivación de la actividad se produzca también un impulso de las políticas públicas en materia de prevención de riesgos laborales y de un aumento de la actividad inspectora”.
Preocupante subregistro de las enfermedades profesionales
En cuanto a las enfermedades profesionales desde el sindicato apuntan a un preocupante “subregistro que se ha intensificado durante la pandemia y que nos retrotrae hasta 2015, que además tiene un impacto directo en cuanto a la prevención, porque si no se registra no existe y, por lo tanto, no se puede prevenir”. Han abundado en que esta ineficacia es especialmente “escandalosa en el caso de los cánceres de origen laboral” y han señalado que en 2021 solo se comunicaron 51 partes de enfermedad profesional originadas por agentes cancerígenos, de los cuales 31 cursaron con baja.
Por otra parte, han señalado la importancia que tienen las patologías asociadas a los riesgos psicosociales y que sin embargo “no se consideran como enfermedad profesional, como tampoco se notifican, apenas, los trastornos mentales como accidentes de trabajo”.
Repensar y fortalecer el modelo
En definitiva, hay que poner el foco en la prevención y en las condiciones de salud y seguridad en los centros de trabajo, “repensando” el modelo de gestión en las empresas y fortaleciendo aquellos organismos que tengan las competencias en materia de seguridad y salud en el trabajo.
Es decir, “hacen falta cambios legislativos para interiorizar la prevención en el seno de las empresas, mejorar la calidad de las actividades preventivas, incorporar la perspectiva de género en la prevención, abordar los riesgos laborales que se derivan de las nuevas formas de organización del trabajo”. Al mismo tiempo han reclamado a la Administración “una ampliación de los recursos humanos y materiales de la Inspección de Trabajo y de organismos como el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo, y una Fiscalía que aborde con más intensidad su acción en los delitos de riesgo y daño a la salud de las personas trabajadoras”.
Manifiesto 28 abril Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo