02 May Miles de personas claman en las calles de Castilla y León una salida social a la crisis
Miles de personas, unas cuarenta mil en la manifestación de Valladolid, abarrotaron ayer las calles de Castilla y León en el Día Internacional del Trabajo, contra una política económica “fracasada” que lejos de sacarnos de la crisis está suponiendo, como afirmó el Secretario Regional de UGT, Agustín Prieto, más paro ( 6 millones de parados en España y 262.000 en Castilla y León), más recesión, el desmantelamiento del Estado del Bienestar y más recortes. Prieto se refirió a un Gobierno “caduco, que no sirve, que no ofrece respuestas a los ciudadanos”, por eso, reclamó a Rajoy que dimita y convoque elecciones “por “dignidad y vergüenza”.
“Seguiremos alzando la voz, insistió el líder de UGT en su intervención en la manifestación de Valladolid, porque esta es la verdadera marca España, la del rostro de miles de ciudadanos y trabajadores hundidos en la desesperación, sin oportunidad de presente ni de futuro”.
El recien reelegido Secretario Regional de UGT en Castilla y León, se permitió incluso narrar una parábola protagonizada por el Presidente del Gobierno. “Rajoy ascendió al reino de los cielos de la Moncloa, dijo, y afirmó que esto de la economía se arregla haciendo una economía como Dios manda, después, señaló Prieto, descansó, descansó y descansó…”, aunque, según el líder de UGT, “Dios no le oyó, así que envío las siete plagas: el paro, la reforma laboral, los deshaucios, la pobreza, el desmantelamiento de lo público y los recortes”, plagas que siguen soportando los ciudadanos de este país.
Tenemos una sociedad “enferma ” que necesita respuestas, por eso, son necesarias, a juicio del Sindicato, políticas que impulsen el crecimiento y que favorezcan una salida social a la crisis.
En este momento, no se puede mirar a otro lado, insiste UGT, hay que mantener la unidad de la clase trabajadora , luchar todos juntos “no sobra nadie”, afirmó Agustín Prieto, ” vamos a recuperar los derechos perdidos, costará, pero lo lograremos”.
Las calles de Castilla y León volvieron a ser un clamor este 1º de Mayo exigiendo, en definitiva, una cambio de política y otra forma de hacer las cosas.